El Volkswagen Passat GTE estará disponible con la carrocería berlina de cuatro puertas y familiar de cinco. Esta versión se diferencia del resto de la gama Passat por el uso de pinzas de freno azules, un parachoques delantero específico así como llantas diferentes o un cuadro de instrumentos adaptado a las especificaciones de la mecánica Plug-in Hybrid. El volante ha sido heredado directamente del Volkswagen Golf GTI, así como algunos emblemas de la variante híbrida del mismo.
La mecánica es idéntica para ambas variantes, es decir, contarán con un motor gasolina de 1.4 Litros de cubicaje y 156 CV de potencia acoplado a una caja de cambios automática de doble embrague y seis relaciones así como a un motor eléctrico de 116 CV. En conjunto, el eje delantero es capaz de ofrecer un máximo de 218 CV.
El Passat GTE puede moverse en modo eléctrico hasta 50 Km ofreciendo bajo estas circunstancias una autonomía límite de 1000 Km si contamos con los 50 Litros del depósito de gasolina. La energía eléctrica se almancena en baterías de iones de litio de 9,9 kWh de capacidad, las cuales permiten ser recargadas en una toma de corriente de 2,3 kW en 4 horas y 15 minutos. Si optamos por un cargador rápido de 3,6 kW la espera se reduce a 2 horas y 30 minutos.
Volkswagen ha dispuesto de cuatro configuraciones de funcionamiento del sistema híbrido, E-Mode, Hybrid, Battery Charge y GTE. En la primrea opción, el motor de combustión se encuentra desconectado, siendo el propulsor eléctrico el encargado de mover el coche. Esta modalidad se activa por defecto al arrancar la marcha, siempre y cuando haya suficiente carga en las baterías. En la segunda opción conocida como Hybrid, ambos motores son los encargados de impulsar al Volkswagen Passat GTE, consiguiendo además mantener la carga de la batería. El modo Battery Charge sirve para incrementar el nivel de carga de la batería, haciendo funcionar el motor de gasolina como generador mientras que el modo GTE hace que la respuesta al acelerador y el cambio sean más rápidos y que la dirección se endurezca.
La suspensión puede ser de tipo adaptativa de manera opcional. En la modalidad GTE, esta se vuelve más dura y el motor eléctrico y de combustión están siempre en funcionamiento para dar la máxima potencia posible. De esta manera, el Passat GTE es capaz de alcanzar los 100 Km/h desde parado en 8 segundos siendo su velocidad máxima de 220 Km/h. En modo eléctrico, esta última cifra queda limitada a 130 Km/h.
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