El vehículo objeto de la prueba mide 4,45 metros de largo, 1,57 metros de alto, 1,78 metros de ancho mientras que dispone de una distancia entre ejes larga, concretamente homologa 2,63 metros de batalla, lo cual permite mejorar el espacio para los ocupantes así como la motricidad en campo, un manejo que también se ve influenciado por una altura libre al suelo de 22 cm.

En el interior, el Subaru XV destaca principalmente por el espacio disponible tanto para los ocupantes como en el maletero. Cuatro adultos podrán realizar viajes largos cómodamente, sin embargo, las plazas traseras, como ocurre en la gran mayoría de vehículos del segmento con tracción total, no pueden albergar fácilmente a tres ocupantes debido al poco espacio disponible en la banqueta central así como por el tunel central que obligará a dicha persona a tener separadas las piernas. Sin embargo, el Subaru XV sorprende por la cantidad de sitio que tienen las dos plazas posteriores. El maletero tiene una capacidad de 380 litros.
El acceso al habitáculo es sencillo. Los asientos se encuentran en una posición más baja que lo habitual en los todocaminos o crossovers del segmento. También es posible colocar, mediante reglajes eléctricos en el asiento del conductor, la altura del mismo o el de la banqueta. El volante se puede ajustar en altura y profundidad, ofreciendo una correcta posición a la hora de conducir.

Los materiales utilizados en nuestra unidad de pruebas, equipada con el acabado máximo, son el cuero y el plástico. El primero se utiliza para los asientos, volante y palanca de cambios mientras que el segundo lo hace para las puertas, salpicadero y consola central. Este último es de aspecto agradable y blando al tacto. Parece fabricado para durar aunque no sobresale por una calidad muy alta como si ocurre con modelos de la competencia premium como el Audi Q3 o el Range Rover Evoque (estos últimos son claramente muy superiores en precio respecto al Subaru XV). Dispone de numerosos huecos portaobjetos localizados en todas las puertas, la consola central, el resposabrazos y la guantera.
Desde el volante se puede controlar el ordenador de abordo, desde el cual consultar la tracción de cada rueda, los consumos y la autonomía del vehículo. También es posible activar el control de crucero, el manos libres o modificar el volumen o la radio.

Las versiones Executive y Executive Plus disponen de una pantalla táctil en el centro del salpicadero. Desde ella podemos acceder a la radio, teléfono y el navegador. Para ello será necesario desviar ligeramente la vista de la carretera ya que se encuentra en una posición baja respecto a la vista del conductor. A nivel de seguridad cuenta con elementos como el airbag de rodilla, asistente de arranque en cuesta, asistente de frenado, cámara de visión trasera, reposacabezas delanteros activos y los faros de xenón.
El Subaru XV está disponible en el acabado español en cuatro variantes: Advanced, Executive, Sport y Executive Plus, pudiendose adqurir el primero desde 19.100 Euros sin descuentos mientras que la variante más costosa de la gama alcanza un valor máximo de 28.850 Euros sin descuentos.
- Subaru XV 1.6 Advanced 19.100 Euros
- Subaru XV 1.6 Executive 22.000 Euros
- Subaru XV 2.0 TD Sport 25.275 Euros
- Subaru XV 2.0 Executive Automático 25.500 Euros
- Subaru XV 2.0 TD Executive 26.850 Euros
- Subaru XV 2.0 Executive Plus Automático 27.500 Euros
- Subaru XV 2.0 TD Executive Plus 28.850 Euros
Lo mejor del coche: Espacio interior, precio y habilidades en el campo.
Lo peor del coche: Algo ruidoso el motor en frío y poca adherencia de los neumáticos en asfalto.
http://www.youtube.com/watch?v=wLnQKSItNxw
[…] Segunda parte […]
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