El Sport Series utilizará un chasis de fibra único exclusivo para él, con un acceso al habitáculo más cómodo para poder utilizar el coche a diario. Se espera que las dimensiones sean similares a las del 650S, pero este nuevo modelo no contará con el sistema suspensión conectada electrónicamente que tanto ha dado que hablar en sus hermanos, ni con aerodinámica activa. Pese a esto, la aceleración se situará muy cerca de los 4,0 segundos.
Según Mike Flewitt, CEO de la marca, “el nuevo modelo tendrá la mejor relación peso-potencia y mejores prestaciones que ninguno de sus rivales”.
Con este movimiento McLaren pretende hacer frente a vehículos como por ejemplo el Porsche 911 o el Mercedes AMG GT, y conseguir así una gama de 3 modelos (Sport Series, 650S y P1). La marca británica espera vender alrededor de 2500 unidades de su nuevo modelo, que sumadas a las ventas del 650S situarían las ventas de la firma en aproximadamente 4000 vehículos al año, una cifra que garantizaría su supervivencia a largo plazo.
Para hacer frente a este aumento de la demanda, antes del año 2016 McLaren espera añadir unos 40 concesionarios a la lista de 60 que tienen hoy en día repartidos por todo el mundo. De todas formas Flewitt añade que “no queremos crecer tanto hasta el punto de que nuestros clientes pierdan esa sensación de pertenecer a una familia. Sabemos lo mucho que valoran este hecho diferencial de nuestra marca”.
Desde hace algunos meses McLaren ha empezado a desvelar algunos teasers de su nuevo modelo bajo el hashtag #BlagSwanMoments, así que estaremos atentos a la información que vayamos conociendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario