El accidente se produjo en la autopista M7 en Hungría a comienzos de Octubre de 2014 cuando el coche viajaba hacia Nagykanizsa. Los dos ocupantes del vehículo fueron trasladados al hospital. Al menos uno se cree que está recibiendo tratamiento por lesiones graves.
El Lamborghini Huracan que está protagonizando estas líneas quedo completamente irreconocible. La rueda es la única indicación de que este montón de cenizas fue alguna vez un Lamborghini Huracán. Las fotos revelan que el coche se salió de la carretera, llegando finalmente a una cuenta cercana a la autopista.
El fuego destruyó por completo la carrocería, dejando un puñado de componentes para ayudar a identificar los restos. La Policía está investigando las circunstancias que llevaron al accidente. La causa aún se desconoce aunque se sospecha que la velocidad podría haber sido un factor fundamental en la pérdida de control del automóvil.
El hecho de que los ocupantes no murieran en semejante accidente demuestra la seguridad con la que ha sido dotado el último Lamborghini en llegar a los concesionarios.
Finalmente, tal y como hemos podido saber, el seguro se hará cargo del siniestro, abonando la cantidad del vehículo a su propietario.
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